El Cerro, terreno lleno de calor humano, ritos
populares, verborrea de tonalidades mixtas; así como gran adicción por los
cultos sincréticos, cuenta con sitios característicos de interés no sólo local,
sino nacional.

El renombrado eje, tiene más de tres
kilómetros de longitud y sobre él transitan, constantemente, vehículos de todo
tipo; procedentes de la capital cubana o de cualquier parte del país.Disímiles
son las huellas que deja este trasiego
de los monstruos rodantes cuando
se deslizan por su pavimento , que no le han quitado su encanto vial, ya sea en su tramo cerrero, o
en su unión, hacia el oeste, con La Calzada de Puentes Grandes y la contigua
Avenida 51, en su hermano municipio Marianao.
La Calzada del Cerro por tanto, es una de las
perlas que adornan el collar de asfalto
que adornan nuestra ciudad y una marca del abolengo del municipio que la
alberga.