
La Habana, 21 ene (AIN) La insigne actriz cubana, Premio Nacional de
la Radio, Marta Jiménez Oropesa, la inefable Rita del programa Alegrías
de sobremesa, de Radio Progreso, falleció en la madrugada de hoy, a los
95 años, en esta capital.
Con una ejemplar trayectoria y con
innumerables distinciones y reconocimientos ganados con su talento y
carisma durante 65 años ininterrumpidos de intensa vida profesional,
Marta es una de esas cubanas de pura cepa, quienes con solo mirarlos,
nos iluminan la vida con su sonrisa, gracia y humanidad desbordadas.
Trabajadora ejemplar del Instituto Cubano de Radio y Televisión, Marta
nació el 25 de noviembre de 1919 y por su profesionalidad y constancia
se erigió en una reconocida actriz con alta maestría y capacidad
artística, gran experta en el medio radial y muy querida por su pueblo,
especialmente por su personaje de Rita, del longevo programa humorístico
de Radio Progreso y su distintiva frase de: Qué gente, caballeros, qué
gente.
No solo fue una actriz excepcional, sino que también
incursionó en la dirección de programas dramatizados y como intérprete
imprimió su personal sello a espacios variados como infantiles, novelas,
aventuras y humorísticos.
Otras de sus admirables facetas fue su
labor pedagógica durante más de 40 años impartiendo cursos de actuación,
voz y dicción en la formación de nuevos valores artísticos en todo el
territorio nacional.
A su haber cuentan lauros como los numerosos
reconocimientos que le otorgaron los Festivales Nacionales de la Radio
Cubana, concursos de la UNEAC, y los conferidos por el Ministerio de
Cultura por su aporte profesional en el histórico programa Alegrías de
Sobremesa, además del Premio de la Popularidad del programa de la
Televisión Cubana Entre tú y yo.
Entre las Distinciones que ha
recibido figuran: Premio Nacional de Radio, Premio Nacional del Humor,
la condición de Artista de Mérito del ICRT, la Distinción Alejo
Carpentier, Distinción por La Cultura Nacional, Distinción Raúl Gómez
García, el Micrófono de la Radio Cubana, y el Sello de Laureado.
Poco a poco, con una mesura admirable Marta se labró su excepcional
carrera en una larga vida, en la cual desde la humildad y la entrega
absolutas se hizo admirar, respetar y querer por generaciones de
cubanos.
Muchos guardarán su imagen en esas arcas especiales de la
memoria individual como protagonista, junto al gran poeta e improvisador
Joseito Fernández en el polémico programa Suceso de hoy, que narraba la
crónica roja de una jornada, a los acordes de la inmortal Guantanamera y
con la métrica de las décimas.
Otros la rememorarán como Juana,
la inseparable acompañante de Tarzán, en aquellas aventuras radiales que
compartía con otro gran actor, Enrique Santiesteban.
También dejó
su huella imborrable en las transmisiones inaugurales de la televisión
en Cuba, ya fuera en la propaganda comercial o en programas y papeles
de las más diversas intenciones, para así demostrar sus indiscutibles
facultades interpretativas, tanto para el drama como para la comedia.
El cadáver de la destacada actriz se encuentra expuesto en la
funeraria de Calzada y K, y su sepelio se efectuará hoy a las cuatro de
la tarde.